El Real Club de Golf de Las Palmas conquista Bandama en un Interclub histórico

El equipo grancanario se impone con claridad al Real Club de Golf de Tenerife (21,5-11,5) en la 89ª edición del clásico

El Interclub volvió a encender las emociones en los Llanos de Bandama. Tradición, rivalidad y camaradería se dieron cita en un fin de semana inolvidable, en el que el Real Club de Golf de Las Palmas se proclamó vencedor frente al Real Club de Golf de Tenerife por un contundente 21,5 a 11,5. Una victoria que, más allá del resultado, reafirma el peso histórico del decano del golf español en esta competición que ya camina hacia el siglo de vida.

Desde el primer golpe del sábado se respiró un ambiente especial. Bandama, con su recorrido desafiante y la majestuosa Caldera como telón de fondo, parecía vestirse para la ocasión. Y es que no todos los días se disputa un torneo que acumula 89 ediciones y que ha visto pasar a generaciones enteras de golfistas canarios.

La jornada arrancó con los partidos por parejas, donde los locales comenzaron a marcar diferencias. El domingo, en los duelos individuales, el dominio del club anfitrión terminó por decantar la balanza. El capitán, Emilio León, lideró a un equipo que combinó experiencia y juventud con acierto, mientras que el conjunto tinerfeño, dirigido por Juan Ramón Carrillo, peleó cada punto con la ilusión intacta de revalidar la victoria del año pasado en casa.

Además, como siempre, hubo lugar para lo que hace único a este torneo: la convivencia. La clásica cena de bienvenida fue, una vez más, un desfile de anécdotas, abrazos y ese “pique” sano que solo el golf sabe transformar en rivalidad sobre el campo. Y cuando cayó el último putt del domingo, la tradición mandó regresar al hoyo 19, donde vencedores y vencidos volvieron a brindar juntos, conscientes de que el verdadero triunfo del Interclub es mantener viva esta hermandad casi centenaria.

La verdad es que el calor apretó durante todo el fin de semana, pero ni las altas temperaturas lograron restar entusiasmo a jugadores y aficionados. Al contrario, el ambiente fue una fiesta constante, con el público acompañando cada golpe y los protagonistas disfrutando de un torneo que es, al mismo tiempo, competición y legado.

Con esta victoria, el Real Club de Golf de Las Palmas añade un nuevo capítulo a su rica historia en el Interclub y lo hace en casa, en ese escenario único donde nació el golf en España en 1891. Y es que Bandama no solo es un campo: es memoria, identidad y emoción compartida.